Resumo:
El presente trabajo es una sistematización de una experiencia de intervención,
donde participé como Trabajadora Social, en el Servicio de Salud Mental del
Hospital Interzonal de Agudos "Dr. J. Penna" de la ciudad de Bahía Blanca.
Experiencia que, cómo marca el subtítulo, marchó desde "el arranque" en el
manicomio hasta "otras formas" institucionales de atravesar la vida de los sujetos
con padecimiento mental.
El camino de trabajo institucional y todavía el "nuevo modo" de funcionamiento
tuvieron y tienen en su interior, pugnas y contradicciones que difícilmente tengan
una resolución lineal, pero vale rescatar que el fundamento ético que lo sostiene ha
sido y es una "práctica subjetivante" basada en los derechos básicos que, entiendo
tiene cada sujeto, los derechos humanos. En contraposición al "arrasamiento" del
sujeto inherentes a las prácticas manicomiales, las practicas subjetivantes son
aquellas que crean, re-crean y propician la subjetividad de las personas, en tanto
sujetos.
