Resumen:
Argentina experimentó a finales del siglo XIX un proceso de
industrialización a partir del cual dio lugar al surgimiento de la clase proletaria,
concentrada principalmente en las grandes ciudades; la inserción de la mujer en el
mercado de trabajo se da en este contexto histórico y con rasgos particularmente
específicos, ya que, por un lado, constituye el sector más explotado de todos y,
por otro, se ve obligada a modificar su vida familiar independizándose
parcialmente de su rol tradicional